Abstract
La fisioterapia se caracteriza por ser un área de la salud que, en su gran mayoría, requiere del contacto físico para tratar las diversas patologías de los pacientes. La enfermedad del COVID- 19 y su alto grado de contagio ha supuesto una adaptación a la forma en la que se abordan las lesiones de los pacientes. Las secuelas que la enfermedad deja a nivel pulmonar y/o las atrofias musculares por encamamiento son un claro ejemplo de la afectación funcional con la que los pacientes tendrán que lidiar en los meses futuros a ser dados de alta médica. Sin embargo, nos enfrentamos ante el echo de que aún no sabemos cuáles serán las secuelas a largo plazo: artralgias, mialgias, cefaleas, etc. Es por ello que, con el apoyo de una buena alimentación sumada al uso de las técnicas fisioterapéuticas, será fundamental para la recuperación del paciente. El fisioterapeuta y el nutriólogo deberán aprender a trabajar en conjunto, como nunca antes, en beneficio del paciente. ¿Qué alimentos puede ofrecer el nutriólogo que me ayuden a mí como fisioterapeuta en el tratamiento de un síndromedoloroso, o del tratamiento de un proceso inflamatorio? ¿Cuántas personas "subirán de peso" durante esta pandemia y que a corto y mediano plazo requerirán los servicios de nutrición y fisioterapia? Estas son algunas de las preguntas que nos estamos haciendo. Es por ello, que el fisioterapeuta deberá comprender lo más rápido posible, que la alimentaciónjuega un papel muy importante dentro de los procesos de recuperación y rehabilitación.